Es un conjunto de narraciones escrito por un colectivo de autores que presentó este libro en la década de los ochenta. El relato a que me refiero mezcla humor, realidad y ficción contando la historia de un ex director de banco / escritor que revive un atraco y a la vez planea escribir un cuento sobre su actuación en el atraco. Está escrito con una prosa rica y proclive a la ironía: "´En el Ebro gané otra estrella, pero me di cuenta de que habíamos perdido la guerra... Mis hombres y yo nos liquidamos a una compañía entera de facciosos´. Siempre he recordado que él fue la primera persona a la que escuché expresar satisfacción por haberle dado el pasaporte a gente del otro bando. Y eso que todo el mundo se vanagloriaba de no haber disparado un solo tiro o, si no había tenido otro remedio, de no haber apuntado nunca a un enemigo concreto, ¡dos ejemplos bien patentes del porqué se había perdido la guerra!" Además, tiene lugar para una indagación sobre qué sienten algunos al empuñar un arma: " la manera de humanizar el tacto entre la mano y la herramienta, eso que da seguridad a quien se sirve de ellas, la compenetración entre el frío del metal y la tibieza de la piel, la camaradería, la confianza que puede nacer de esta identificación." Un relato corto y muy interesante, creativo y con un humor muy logrado.