Henning Mankell: "El retorno del profesor de baile" ( 2 )

¿Puede un asesino perdonar a su víctima, a la que ha matado por odio, una vez que ya ha consumado el asesinato? ¿Puede ponerle una vela, alzar un vaso y brindar por ella? Quizá no es tan descabellado pensar que sí. Durante años arrastras contigo tu dolor y tu rabia, buscas a quien las engendró en ti. Y una vez que lo matas, la rabia fluye y el odio fluye, como de una herida abierta, como la sangre, fluyen. Salen de ti y tú te dices que no eres malo, que no eres violento, que el odio te convirtió en otro y, una vez que le has dado salida, vuelves a ser una persona normal, un hombre sin odio y que no lleva dentro de sí un deseo de violencia. Mankell nos hace pensar en estas cuestiones mostrándonos los pensamientos de sus personajes y creando de paso la que - hasta el momento- creo que es su mejor novela, la más completa, la que ofrece una atmósfera más conseguida y, sobre todo, la que logra que nos interesemos más y de manera más profunda por los personajes, la clave de toda novela.